Todavía recuerdo la primera vez que vi las "Necomimi", esas orejillas de gato para humanos nacidas en Tokyo de la empresa Neurowear que se movían gracias a los estímulos de nuestro propio cerebro, a través de un sensor neuronal. Así, las orejas se ponían rectas cuanto la persona que las llevaba estaba concentrada, o se bajaban cuando estaba relajada.
El primer modelo se mostró allá por 2011, empezándose a vender a finales de abril del año pasado. Para que funcionase, sólo necesitabas las "Necomimi" y cuatro pilas AAA. Además, las orejas eran intercambiables, para poder escoger un tipo de tela o color distinto según tu look del día o lo que te apeteciese más en el momento.
Ya las tenía algo olvidadas, cuando me topé con la noticia de la nueva cola que iban a sacar a la venta, cuyo prototipo salió a finales de Septiembre de 2012. El nombre de la colita es "Shippo", y se mueve, al igual que las orejas, según tu estado anímico. Además, ahora vienen conectados a una aplicación del móvil que te permite guardar tu estado anímico en el mapa, para que otros "neurousuarios" puedan localizar lugares para relajarse o divertirse.
Se basa en la misma tecnología que las "Necomimi", percibiendo ondas cerebrales y latidos para que la cola se mueva según el estado anímico.
Yo ya estoy imaginando las calles de Tokyo llenas de japos con orejitas y colitas que se mueven, lo que en parte me parece adorable, y en parte, cuanto menos, extraño.
¿Cuál de los dos inventos os gusta más? ¿Os los pondríais?
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